Investigadores de la Universidad del País Vasco han desarrollado una técnica que permite imprimir en 3D comprimidos farmacéuticos utilizando diferentes tipos de almidón. Al modificar los tipos de almidón utilizados y la forma de las tabletas, el equipo puede ajustar la liberación del fármaco para que sea rápida o lenta. Esto incluye la liberación completa del fármaco encapsulado en tan solo diez minutos hasta seis horas, lo que proporciona un margen significativo para abordar una amplia variedad de situaciones terapéuticas. La técnica podría permitir una medicina más personalizada para cohortes de pacientes que requieren regímenes de dosificación especializados, como niños pequeños y personas mayores. Otro beneficio del enfoque es la capacidad de administrar fármacos hidrofóbicos, que normalmente son difíciles de formular porque no se disuelven en agua.
La dosificación oral de medicamentos en forma de tabletas ingeribles es, en cierto modo, la forma más sencilla de administrar un medicamento, ya que requiere que el paciente simplemente trague una tableta. Sin embargo, existe una falta de diversidad en las dosis disponibles para determinados pacientes. Estos pacientes a menudo necesitarán dosis diferentes en comparación con las dosis estándar para adultos y pueden beneficiarse de diferentes perfiles de liberación. Esto también se aplica a pacientes con diferentes niveles de gravedad de la enfermedad, y la genética y el género también pueden desempeñar un papel en el perfil de dosificación y liberación más apropiado para un paciente específico.
Sin embargo, los comprimidos suelen estar disponibles en una formulación única que no tiene en cuenta estos matices. Para abordar esto, estos investigadores han desarrollado un método para imprimir tabletas en 3D y ajustar la liberación para crear un enfoque más personalizado de la medicación oral.
Para crear sus píldoras personalizadas, los investigadores recurrieron a un material natural, el almidón. “Pudimos preparar tabletas a base de tres tipos de almidón -dos de maíz (normal y ceroso) y un tipo de papa- con diferentes geometrías y cargadas con un fármaco insoluble”, dijo Kizkitza González, uno de los los creadores de los nuevos tipos de tabletas.
Al utilizar diferentes tipos de almidón, los investigadores pudieron alterar drásticamente el perfil de liberación del fármaco incluido. “Observamos la importancia del origen botánico del almidón en prácticamente todas las propiedades, como la microestructura porosa, la formación de una red estable o la liberación del fármaco”, dijo González. “En el caso del almidón de maíz normal, la liberación del fármaco es instantánea y el fármaco se libera por completo en 10 minutos; en el caso del almidón ceroso de maíz y de patata, la liberación es más continua y puede tardar hasta 6 horas en liberarse por completo. También pudimos demostrar la importancia de la geometría de las tabletas en la liberación de fármacos”.
Finalmente, al combinar dos tipos diferentes de almidón, los investigadores pudieron crear una liberación bifásica, lo que permitió aplicaciones más avanzadas. “También se imprimieron tabletas que combinan diferentes tipos de almidón”, dijo González. “En este caso, la liberación se produce en dos etapas. Por ejemplo, en el caso de una infección, en una etapa inicial utilizando almidón de maíz normal, se podría liberar inmediatamente un medicamento para aliviar el dolor, y en una etapa posterior, con cualquiera de los otros dos tipos de almidón, se podría liberar un antibiótico. más continuamente”.
Estudio publicado en la revista International Journal of Pharmaceutics : Impresión 3D de comprimidos personalizados exclusivamente de almidón con cinética de liberación combinada