Respuesta: 3
Convulsiones y rabdomiolisis
Envenenamiento por giromitrina
La foto muestra falsas colmenillas ( Gyromitra esculenta , flecha) mezcladas con la cosecha prevista de verdaderas colmenillas ( Morchella esculenta ). Si bien la verdadera morilla es segura y comestible, la falsa morilla visualmente similar contiene la toxina giromitrina.
Gyromitra esculenta crece principalmente en ubicaciones geográficas de bosques de coníferas templados que generalmente se encuentran creciendo debajo de los árboles, y se informa que la toxicidad varía según la ubicación [1]. Aunque muchos recolectores evitan el Gyromitra esculenta mientras cazan, hay un subconjunto de individuos que buscan específicamente este hongo, considerándolo un manjar [1,2]. Se debe realizar una preparación cuidadosa, incluido el secado y el sancochado, para disminuir la posibilidad de toxicidad [3,4].
Presentación
Gyromitra esculenta son hongos sin branquias de color marrón rojizo con una superficie enrevesada. Los síntomas de la toxicidad por giromitrina incluyen:
- náuseas y vómitos
- dolor abdominal
- mialgias
- convulsiones
- rabdomiólisis.
Las náuseas, los vómitos o la diarrea suelen aparecer dentro de las 48 horas posteriores a la ingestión [1-3,5]. Otros efectos de la intoxicación por Gyromitra pueden incluir insuficiencia hepática, que generalmente ocurre aproximadamente 48 horas después de la ingestión, potencialmente relacionada con la peroxidación lipídica relacionada con compuestos adicionales de hidracina [ 2,3]. La lesión por oxidación también puede causar metahemoglobinemia y hemólisis [3].
Mecanismo y tratamiento
La giromitrina se metaboliza a monometilhidrazina (MMH), que produce una toxicidad análoga a la sobredosis de isoniazida al impedir la formación de ácido gamma aminobutírico (GABA) en el cerebro. MMH inhibe la piridoxina fosfoquinasa, que impide que se produzca la forma activa de vitamina B6 (fosfato de piridoxal), e inhibe la descarboxilasa del ácido glutámico (GAD), que es responsable de convertir el glutamato en GABA [2,5]. El agotamiento de GABA provoca convulsiones que pueden ser refractarias al tratamiento con benzodiazepinas.
Por lo tanto, la piridoxina es una terapia recomendada además del fenobarbital para las convulsiones causadas por Gyromitra [1-5]. La dosificación de piridoxina en la intoxicación por giromitrina no está bien establecida, pero una estrategia de dosificación aceptada es 70 mg/kg por vía intravenosa hasta 5 g, repetida una vez, aunque se han informado dosis más altas [1].
Otros hongos tóxicos
Las otras respuestas se refieren a los efectos de otros hongos tóxicos [1,5].
Coprinopsis atramentaria se encuentra en América del Norte y normalmente crece desde finales de la primavera hasta el otoño. Su toxicidad es un síndrome de disulfiram (la perdición de Tippler) que se caracteriza por enrojecimiento facial, vómitos, malestar, palpitaciones, parestesias y agitación que pueden notarse entre 10 y 20 minutos después de la ingestión de alcohol.
Los hongos que contienen psilocibina, también conocidos como hongos mágicos, se asocian con alucinaciones ya que la toxina es similar al LSD.
Los hongos Inocybe y Clitocybe contienen muscarina, que es estructuralmente similar a la acetilcolina y puede producir síntomas coninérgicos como vómitos y diarrea, broncorrea y salivación.
Perlas para llevar a casa junto a la cama
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La toxicidad de Gyromitra (falsa morilla) produce convulsiones que pueden ser refractarias a las benzodiazepinas.
- Se recomienda piridoxina además del tratamiento estándar para las convulsiones inducidas por Gyromitra.
- Las náuseas, los vómitos o la diarrea suelen aparecer entre 5 y 48 horas después de la ingestión.
- Puede producirse una lesión hepática aguda.
- La ingestión de falsas morillas también puede causar metahemoglobinemia y hemólisis.