En Johns Hopkins, investigadores clínicos han desarrollado un conjunto de herramientas quirúrgicas que les permiten crear más fácilmente una oreja de reemplazo para quienes nacen con orejas malformadas o faltantes. Actualmente, utilizando cartílago extraído de las costillas, los cirujanos pueden crear una nueva oreja, pero el proceso es difícil y requiere cierto talento artístico para esculpir el cartílago en la forma correcta. Estos nuevos dispositivos hacen que el procedimiento sea más ágil y eficiente.
Un dispositivo permite al cirujano cortar de forma rápida y precisa el cartílago extraído en el grosor requerido, lo que ayuda a que un poco de cartílago llegue mucho más lejos. Luego, un sistema estilo “cortador de galletas” corta automáticamente las hojas de cartílago en trozos más pequeños que se pueden unir fácilmente para formar una forma natural de oreja.
Algunos niños nacen sin oreja, lo que se llama anotia, o con una malformación del oído, lo que se llama microtia. En la actualidad, la forma estándar en la que se tratan estas afecciones implica extraer cartílago de las costillas del paciente y luego esculpirlo a mano alzada hasta darle una forma aproximada de oreja antes de la implantación quirúrgica. Esto es difícil: los cirujanos son claramente muy hábiles con las manos, pero las habilidades artísticas, como la escultura, a menudo están un poco fuera de su zona de confort.
"Aunque la cirugía de reconstrucción de oreja para reparar la microtia y la anotia tanto en casos pediátricos como en adultos se practica desde hace varios años, sigue siendo un procedimiento exigente tanto para el paciente como para el cirujano", dijo Angelo Leto Barone, investigador involucrado en el proyecto. "Lo que lo hace realmente difícil es que construir un oído adecuado requiere un poco de habilidad artística".
Para abordar esto, estos investigadores de Hopkins han desarrollado nuevas herramientas quirúrgicas para agilizar el procedimiento. La primera herramienta permite al cirujano cortar fácilmente el cartílago extraído hasta obtener el grosor deseado. El dispositivo también permite al cirujano extraer menos cartílago del paciente. "El dispositivo de corte de cartílago básicamente duplica la cantidad de tejido de cartílago disponible para la cirugía, lo que significa que se debe recolectar menos para producir de manera segura toda la oreja", dijo Anirudh Arun, otro investigador involucrado en el estudio. "Solo necesitamos dos costillas y media en lugar de las cuatro tradicionales de las técnicas anteriores: menos desperdicio y menos molestias para el paciente".
Luego, el segundo dispositivo le permite al cirujano crear una forma de oreja en forma de “cortador de galletas”. La prensa contiene cuchillas de acero y puede recortar rápidamente el cartílago cortado en las formas requeridas. "No sólo el proceso es más rápido, sino que la plantilla elimina el daño del cartílago que a menudo acompaña a la escultura realizada en métodos de reconstrucción anteriores", dijo Leto Barone. “Esto hace que nuestro sistema sea altamente reproducible, fácil de usar, eficiente en términos de tiempo y rentable. Lo mejor de todo es que produce constantemente una oreja de apariencia natural que ayuda a los niños a evitar ser objeto de burlas o acoso, y permite a los adultos hacer cosas que otros dan por sentado, como usar anteojos”.
Estudio en cirugía plástica facial y medicina estética : reparación de microtia preservadora de cartílago: primera prueba en humanos de producción de estructuras autólogas