Los ingenieros del MIT han desarrollado un sistema que podría permitir a los usuarios de prótesis robóticas controlar con mayor sensibilidad sus extremidades biónicas. La tecnología consiste en implantar pares de pequeñas cuentas magnéticas en los músculos. Cuando los músculos se contraen, las cuentas se acercan, lo que permite que los dispositivos protésicos calculen con mayor precisión las intenciones del usuario y las reflejen.
Los sistemas actuales miden la actividad eléctrica de los músculos, pero esto no es tan preciso como medir el movimiento muscular real. Medgadget cubrió la tecnología por última vez en agosto de 2021 y, desde entonces, los investigadores la han probado en pavos, demostrando que los imanes implantados no causan inflamación ni irritación. Es importante destacar que pueden ayudar a medir con mucha precisión la longitud de los músculos mientras los pavos atravesaban una carrera de obstáculos (sí, de verdad), lo que refleja las condiciones del mundo real fuera del laboratorio.
Cada año parece traer nuevas mejoras en tecnología de asistencia, como novedosas prótesis robóticas y sillas de ruedas. Con suerte, en el futuro, los pacientes que pierden una extremidad o experimentan debilidad o parálisis muscular tendrán a su disposición un conjunto completo de prótesis robóticas avanzadas, lo que brindará comodidad e independencia inmediatas y significativas. Hasta entonces, podemos trazar cómo avanzan dichas tecnologías.
Este último desarrollo busca mejorar la forma en que las prótesis robóticas pueden detectar las intenciones de sus usuarios y moverse en consecuencia. En la actualidad, estos dispositivos suelen detectar la actividad eléctrica de los músculos mediante un proceso llamado electromiografía de superficie. Sin embargo, este enfoque no tiene en cuenta la actividad muscular, en términos de velocidad de movimiento y longitud del músculo durante la contracción.
Para abordar esta limitación, los investigadores del MIT idearon un nuevo enfoque al que llaman magnetomicrometría. Se trata de pares simples de perlas magnéticas implantadas que se mueven juntas cuando un músculo se contrae y se alejan entre sí cuando se relaja. La idea es potenciar las prótesis robóticas para que detecten la señal magnética del músculo e infieren las intenciones del usuario.
Si bien esto puede parecer fantástico en la práctica y los investigadores han demostrado que funciona en condiciones controladas en el laboratorio, es importante probar las tecnologías en un contexto del mundo real. Entonces, con este espíritu, estos investigadores implantaron las cuentas magnéticas en pavos y los pusieron a trabajar corriendo alrededor de una carrera de obstáculos. Las aves corrieron y saltaron obstáculos, mientras los investigadores evaluaban si las cuentas magnéticas podían proporcionar lecturas precisas de la longitud de los músculos.
Afortunadamente, el sistema fue muy útil para evaluar la longitud de los músculos y pudo proporcionar una medición en menos de un milisegundo. Además, se compara favorablemente con equipos más tradicionales en términos de precisión. Los investigadores también estudiaron los efectos de las perlas en el cuerpo y descubrieron que no causan irritación en el músculo, lo que sugiere que son adecuadas para una implantación a largo plazo.
Aquí hay un video del MIT sobre la tecnología:
Estudio en Fronteras en Bioingeniería y Biotecnología : Seguimiento muscular sin ataduras mediante magnetomicrometría
Flashback: perlas magnéticas para un control más preciso de las extremidades biónicas
Vía: MIT